El Soberao es una revista surgida a principios de la década de 1980, en el seno del Ateneo de Los Palacios y Villafranca. Si bien, en un principio abarcaba temáticas diversas, pronto se convierte en una revista integramente cultural. Desde su creación hasta su último número, aparecido en 1998 fue uno de los principales escaparates culturales de Los Palacios y Villafranca. Hoy, casi quince años después de desaparecer, proponemos su resurrección. Sabemos que se trata de una tarea difícil, pero que con tu participación, también será ilusionante y agradecida.

viernes, 20 de junio de 2014

LA VIDA EN UNA REVISTA

Este es el hombre que protagoniza la entrevista que uno ha publicado en el número tres de El Soberao RevistaCultural, presentado anoche con la fresquita en el Parque de los Hermanamientos. Se llama Nino Gañan y es doctor y profesor en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla. Por diversos avatares, desde hace varios años vive en la pedanía palaciega de El Trobal con su mujer, sus dos hijas, sus esculturas, sus dibujos y sus galgos. Un buen tipo, con el que apetece tomarse unas cervezas hablando de arte, literatura, política... el mundo y la vida. Como hicimos anoche bajo el sombrajo de las estrellas, acunados por la música del quinto Beatles, José Manuel Núñez.

Para ser justos, detengámonos también en la revista, que vuelve a sorprender gratamente gracias al aliento del timonel Victoriano Rosal Domínguez y sus grumetes Victoria Baquero y Álvaro Benavides Caballero, dos jóvenes más que talentosos. Se lucen de nuevo con la portada, obra de Celia Barragán, y la cuidada selección de microrrelatos, poesías y otros textos literarios y artísticos, como el de Francisco Benítez Acosta sobre Beethoven o la reseña de David Mayo en torno al fugaz y decisivo encuentro de Cobain, líder de Nirvana, y el inclasificable Burroughs. Regresan a estas páginas dos históricos de la cultura palaciega, Emilio Gavira y Francisco Caballero Galvan. Carlos A. Font continúa sus investigaciones en torno a la historia del pueblo y Gabriel Diaz Barragan desmonta la moda de llamar novela gráfica a lo que siempre ha sido comic, o mejor, historietas e incluso tbos.

Y así, entre la tradición y la novedad, los jóvenes se hacen mayores y los mayores nos hacemos viejos. Mientras de por medio haya cervezas y conversaciones lúdicas y lúcidas, da alegría aferrarse al ciclo de la vida que late en las páginas siempre breves de una revista cultural como El Soberao


Manuel Sollo

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